domingo, 22 de noviembre de 2009

el bello sexo II

extraido de mis tertulias con Carmen
... el ser humano, como tal, siempre ha dicho, escrito y aireado todas las tonterías habidas y por haber y en caso de no haberlas se las inventa sin vergüenza ninguna.
Siguiendo esta norma que llevamos inscrita en nuestros genes hemos desarrollado el lenguaje con el único fin de tergiversarlo hasta poder dar nombre a todo lo visible, invisible y hasta inexistente. Así hemos decidido llamar a las mujeres "el sexo débil" o también "el bello sexo", esto visto desde la perspectiva del macho -quédate con el piropo, hazme la cena y calla- por cierto, hay muchas formas poéticas para referirse a las mujeres pero para los hombres conozco pocas y suenan mas bien como afeminadas y una cosa es que te digan la gracia y otra muy distinta llamarte sarasa. Ya expuse en otro articulo la diferencia entre hombre y macho hoy quiero cavilar sobre quien es el "débil y el bello".
Si nos comparamos con el resto de animales de la creación podemos ver claramente quien es quien.
En las aves: ¿quien tiene las plumas mas vistosas para pavonearse ante la pareja?- el macho

Entre los mamíferos salvajes: quien tiene el cuerpo mas vigoroso y el pelaje mas largo y fantástico? - el macho

Y los animales marinos: ¿quien tiene los colores mas bonitos y el cuerpo mas hermoso? - el macho

Entre los humanos: ¿quien tiene que pasar por el calvario del maquillaje, peluquería, combinaciones de prendas de vestir y demás tormentos ideados para mejorar su hermosura?
el macho no, el hombre tampoco. Al hombre con darse una ducha, arreglarse el pelo con los dedos y afeitarse un poco ya le llega para ser lo que es: un bello ejemplar de homo sapiens. Y a algunos ni siquiera les hace falta (o se lo creen) ninguna de estas tres cosas.

En cuanto a quien es "el débil", quien lea esto puede sacar su propia conclusión respondiendo con sinceridad a esta pregunta:
¿quien es capaz de asumir sin queja las funciones que en teoría son del sexo contrario?

Creo que habrá que reconstruir el lenguaje para hacer justicia y asumir que solo somos animales que saben hablar y escribir...